domingo, 22 de julio de 2018

Definitivamente


Caminaba por la vida
solitaria y vacia
gélida... errada...
en inexorable agonía

Caminaba a lo bobo,
sampando bocados,
hacia la boca del lobo,
destino de ahorcado

y de pronto... te encontré...
caminando en una calle transitada
sonriente, bailando... saludé

Buscaba un cometa,
tal vez un favor,
un poco de magia
o un trago de alcohol

(mi respiración...)

No encontré el cometa,
el favor no resultó,
la magia no existe
y aun me mata el alcohol.

Mas encontre en tu sonrisa
uno de los secretos del universo
que como una leve brisa
me mostro el reverso
de la estúpida teoría: 
"de amor nadie se muere"...

(dejame besarte...)

De amor nadie se muere, de amor solo comes,
eres feliz, te sonrojas, sonries...
de amor nadie se muere,
sientes que nada duele
y quieres al mundo entero presumirle
lo especial y maravilloso 
que es el hombre que tu mano sostiene.

Encontré hoy en tu mirada
lo que es el calor de un rayo de sol,
la luz de una estrella,
el compás de una canción.

Me ha costado encontrarte
escondido entre tanta gente
como para poder perderte
como para renunciarte... dejarte... no verte

Y asi las cosas cambiaron,
salio el sol, la magia,
una estrella y un cometa
de repente se estrellaron
en mi cara, en mi puerta.

Migraste de pronto
de tu cama a mi mente,
de tu estancia 
a mi bendita suerte.

(espacio y tiempo conspiraron...)

No recuerdo exactamente cuando
pero recuerdo claramente
haber respirado y tu aliento
inhalado, ese cálido vapor
que exhala tu cuerpo.

¿En otra vida?... ¿en qué momento?...

Recuerdo la sensación de tenerlo
bajando mi garganta
al estomago, llenando mi pecho
¿fue quizas antes de un beso?
no lo se, 
pero es aquel suceso
quien constantemente arrebata
los suspiros, el sueño, mi tiempo...

Me quede prendada a tu sonrisa...

¿Cómo evitar que seas tu el dueño
de mi todo, de mi vida y mi tiempo
si hasta despierta t sueño?

Me parece mas chico el universo
que el infinito existente
en la inmensidad de un amor
asi, a lo bobo

(mas allá de los cuentos de hadas...)

Caminaba de regreso a casa
la primera vez que una sonrisa me sorprendió
sin entender en nada "que pasa?"
ni el "porque me sonrojó?"

"pero yo no voy a amarlo"
me dije en voz alta, a lo loco
e intenté mantener mi desición,
"no quiero, no quiero amarlo"
gritaba, pensaba, soñaba...lo soñaba.

(mi respiración...)

Jamás concebí
despedidas tan largas,
tan sufridas y postergadas
como las que a él, sin duda le sufrí,
jamás despedidas tan amargas....

Hoy me inspira,
resplandece... y me culpa también...
pues él... también se enamoró.